Brandi O'Neill (Jami Gertz), una camarera desengañada, se presta a testificar en contra de su ex novio, quedando bajo custodia de un agente de policía, Jake Cunningham (Shawn Christian). Al llegar la Nochebuena, el policía se tiene que presentar en casa de sus padres en compañía de la joven, a quien presenta como su novia para no desvelar su verdadera identidad. Pero el nivel cultural de la camarera resulta muy chocante en el seno de la familia distinguida familia del agente.