El temible y controvertido rey Herodes encarga a su teniente de mayor confianza Aarón una importante mision: matar a su esposa Miriam si el propio Herodes no regresa con vida de una vista al emperador Octavio. Cuando se difunde el rumor sobre la muerte del monarca, su súbdito Aarón tendrá serias dudas acerca de su cometido.