La guerra maltrata a los niños, y la de Ucrania no es una excepción. El pequeño Yegor Kravtsov lee fragmentos del diario que escribió durante el bombardeo de su ciudad, Mariúpol. En Jersón, el director de un orfanato relata las deportaciones: según fuentes oficiales ucranianas, al menos 12 000 niños han sido llevados a la fuerza a Rusia.