Con la sociedad Fae tensa, Bo se encuentra afrontando nuevos cambios y retos. Trata de forjar un nuevo equilibrio entre la Luz y el lado Oscuro. Mientras tanto, Tamsin, un agente secreto que trabaja para dos clientes separados: Morrígan, que quiere construir un caso contra Bo de modo que ella pueda ejecutarla; y como un mercenario para alguien que quiere atrapar a Bo. Todo se vuelve complicado cuando Kenzi es secuestrada por un Kitsune, enloquecido, que asume su identidad y deliberadamente siembra la desconfianza en las relaciones entre Bo y aquellos más cercanos a él. La tercera temporada culmina con Bo siendo sumergida por un humo negro y volatilizandose, por un supuesto, misterioso y biológico padre.