Egon Weisbach fue uno de los primeros investigadores en el asesinato de los padres Liebert. En su último día de trabajo antes de jubilarse, escolta a un asesino en serie convicto, pero quiere saber por qué mató a alguien que no encajaba en su modus operandi. Gillen está entrevistando a varios asesinos preguntándose por qué mataron a alguien que tampoco encajaba con sus objetivos habituales.