Es el año 1832. La joven Cosette comienza a cuestionar su vida encerrada en el convento. Ella y Valjean deciden escapar y empezar una nueva vida en París, aunque a él le preocupa que pueda ser peligroso para ella. El oficial Javert ha conseguido ascender como policía de París pero no está contento sabiendo que Valjean sigue libre. Marius Pontmercy, convertido en un joven estudiante de derecho, se enfrenta a su abuelo al enterarse de la verdad sobre su difunto padre. Decide dejar su casa y encuentra alojamiento en una pequeña vivienda de París, cuyos vecinos son una familia pobre con bastantes problemas. Cosette todavía se siente encerrada en su nuevo hogar, pero cuando se cruza en su vida Marius, siente que todo puede cambiar y empezar una nueva vida.