Todos los misterios de la zona fronteriza se aclaran. Ahora es el momento del enfrentamiento final, los Lorrendraaiers pelean su guerra interna hasta la muerte, mientras la Hermana Li se ríe. Tara, todavía atormentada por el insomnio, está decidida a encontrar vivos a Bert, Afi y los niños refugiados. Pero también es hora de ajustar viejas cuentas. Quiere vengarse de Shirin.