Hilda ataca a Seiya y éste cae al precipicio que hay entre la estatua de Odin y el castillo. Seiya escucha la voz de saga que le dice que no debe rendirse. Seiya eleva su cosmos y sube el precipicio. Seiya se dirige a la estatua de Odin pero Hilda lo ataca por detrás. Los otros caballeros se interponen para ayudarlo. Seiya llega frente a la estatua y le pide ayuda a Odin pero nada sucede. Entonces Seiya cae al precipicio. Los zafiros de Odin salen volando al aire y se reúnen frente a la estatua. Cada zafiro se coloca en su lugar en el cinturón de Odin y la armadura de Odin emerge. Seiya es salvado por el cosmos de Odin de seguir cayendo y le coloca la armadura. Seiya ahora está listo para pelear. Seiya ataca a Hilda una vez más y esta vez ataca a Hilda con la espada.