Rima estaba triste al ver que Mirmo y Jacky tenían una mascota muglox pero ella no. Setsu por su parte, le regala un muñeco de peluche, pero al darse ella cuenta de que no era lo mismo, decide darle vida con su magia. Al principio era muy simpático y Rima se encariña de él pero la criatura, tiene un enorme apetito y empieza a comer de todo, creciendo en cuanto lo hace, tal parecía que la única que podía detenerlo era Rima y tenía que decidirse pronto ya que el ejército se preparaba para eliminarlo, Rima al ser convencida por Setsu, decide entonces volverlo a dejar a su forma original.