Jacky, cansado de los maltratos y castigos de Azumi, decide irse de casa. Mientras descansaba en el parque, un accidente hizo que entrara a su taza y en ese momento un perro lo encuentra y se lo da a su dueña, que parece ser una chica buena y simpática a diferencia de Azumi. Al llevar la taza a casa, Jacky aparece en la casa de esa chica. Mirmo, preocupado por Jacky va en su búsqueda, y le recuerda, que debe decidir entre su nueva compañera y Azumi debido a una regla del mundo muglox.